Les hemos llamado Sancho y Panza y tras la revisión veterinaria hemos visto que han debido tener una alimentación deficiente y carencia de luz solar pues presentan deformidades en huesos debido a la falta de vitamina D.
Los dos pequeños primates vienen de un propietario particular que los tenía en su casa y fueron decomisados por las autoridades.
Muchas gracias a la Guardia Civil por su labor en este caso.
Los primates no son animales adecuados para ser mascotas pues sus necesidades sociales, de espacio y alimenticias no son posibles de ser cubiertas en un hogar humano.
Necesitamos una mejor legislación que deje clara esta realidad dejando fuera del comercio y tenencia aquellos animales que no sean adecuados para ser animales de compañía y que desgraciadamente aún hoy se comercializan.
Sancho y Panza comienzan ahora su nueva vida recuperándose de las secuelas que su pasado ha dejado en ellos.
Fuente AAP Primadomus
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