Felicidades hermano Salva. Allá donde estés, sopla las velas junto a parte de la familia y amigos que decidieron también dar ese último paso. Que paradoja… Cumples años el mismo mes que te marchaste para siempre. Celebras tu aniversario un día después que nuestro cuñado Carlos.
Hermano, echo de menos tus abrazos. Extraño tu sonrisa, esa con la que enamorabas y hacías feliz a tantos. Nunca olvido tus consejos porque de ellos aprendí, y mucho. Te extraño tete, hoy, ayer y cada segundo de mi vida.
No hay día que deje de pensar en ti. No logro acostumbrarme que ya no estés conmigo. Tu ausencia me entristece. Pero a pesar de todo me alegro al recordar tus palabras y que a pesar de toda adversidad debemos superarlos para continuar. Te amo por siempre hermano.
Hoy en tu 46 cumpleaños aún tu recuerdo permanece intacto, sigo tu ejemplo porque siempre admiré el gran hombre que fuiste. No fueron tus palabras lo que te hicieron grande, fueron tus obras las que hablan por ti. Quisiera que no te hubieras ido pero el puto cáncer no quiso darte la oportunidad de ver crecer a tus hijos… Tu presencia en mi vida me dio la dicha de haber crecido contigo, mi adorado Salva. Sopla esas 46 velas y brinda por todos nosotros. Tu familia lo hacemos a diario. Te quiero infinitamente.
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